José Ramón Rodil y Galloso, I Marqués de Rodil (Santa María de Trobo, Lugo, 5 de febrero de 1789 – Madrid, 19 de febrero de 1853), fue un militar y político español, conocido por su participación en la Guerra de la Independencia, las guerras de independencia hispanoamericanas, y la Primera Guerra Carlista. Destacó por su lealtad a la Corona y su radicalismo político durante el periodo esparterista.
Rodil nació en una familia de clase media y estudió Latinidad y Filosofía en el Seminario de Mondoñedo. Su vida cambió con la Guerra de la Independencia (1808-1814), durante la cual, siendo estudiante en la Universidad de Santiago, se alistó en el Batallón Literario de Santiago. Sus habilidades en combate lo llevaron a ascender a comandante al finalizar la guerra.
En 1816, Rodil fue enviado a América con el Regimiento Infante Don Carlos para combatir a los insurgentes durante las guerras de independencia hispanoamericanas. Sirvió bajo el virrey Pezuela y se destacó por su disciplina y cercanía con la tropa. En la Batalla de Maipú (1818), su liderazgo durante la retirada realista le valió el ascenso a coronel. Fue nombrado gobernador militar de Guamanga y Lima.
Durante el declive del poder español en América, Rodil ganó notoriedad por su dura defensa de El Callao, donde resistió un asedio de casi dos años (1824-1826) con una guarnición mal equipada. Su capitulación fue vista como un episodio honorable, aunque fue también criticado por su dureza, incluyendo la ejecución de treinta y seis conspiradores.
De vuelta en España, Fernando VII lo recibió con honores, otorgándole el título de Marqués de Rodil y la Capitanía General de Aragón. A pesar de su inclinación absolutista inicial, Rodil se alineó con los liberales durante la Primera Guerra Carlista (1833-1840) y ocupó importantes cargos militares, como la jefatura del Ejército del Norte.
En 1834, recibió el marquesado de Rodil y fue nombrado ministro de la Guerra durante el gobierno de Mendizábal. Durante esta etapa, Rodil trató de reformar las fuerzas armadas y aplastó rebeliones carlistas, aunque también enfrentó críticas por su agresiva política militar, incluyendo la quema del Monasterio de Aránzazu.
En 1842, Rodil fue nombrado presidente del Consejo de Ministros y ministro de la Guerra bajo el gobierno de Espartero. Su radicalismo y su dureza en la represión de disturbios en Cataluña contribuyeron a su caída política. Tras ser destituido, Rodil se retiró a la vida pública como senador vitalicio desde 1849 hasta su muerte en 1853.
El Marqués de Rodil fue una figura clave en las guerras y conflictos de su tiempo. Laureado de San Fernando y poseedor de varias condecoraciones, su carrera estuvo marcada por su lealtad a la Corona, su rigor militar y su papel en la política del siglo XIX en España.