María Antonia Abad Fernández

SARA MONTIEL

MARIA ANTONIA ABAD FERNÁNDEZ

Campo de Criptana, 10 Marzo 1928 – Madrid,8 Abril de 2013.

“Nací pobre, pero increíblemente bella”, así respondía la artista manchega cuando le preguntaban por sus orígenes. Nunca se avergonzó de nacer en una humilde localidad de la Mancha, “Mi padre era un gañán, un mozo de labranza, pero nunca nos faltó un plato de comida en la mesa”. Con 14 años su madre le llevó a un concurso de talentos que se celebró en el parque del Buen Retiro en Madrid, en el año 42. Con el dinero del premio se instaló en Madrid y empezó a dar clases de declamación. Otra cosa que tenía clara la joven Sara es que tenía que estudiar.

Si a alguien le debe algo la meteórica carrera de la joven Sara es a Miguel Mihura, el dramaturgo autor de El Sombrero de tres copas o Ninette y un señor de Murcia, le hizo el mejor regalo a la jovencita manchega: ”Encauza tu ambición hacia México y Estados Unidos”, la España de los años 40 se quedaba muy pequeña para el talento y la ambición de una gran estrella, aún así antes de partir a México la joven Sara protagonizó películas con los más grandes de entonces, Fernando Fernán Gómez, Imperio Argentina o Fernando Rey. En México empezó a destacar y a trabajar con los mejores, Katy Jurado, Frida Khalo o Diego Rivera. Entre los filmes que rodó en México, sobresalen Piel Canela y Cárcel de Mujeres.

EN CUBA CONOCIÓ A ERNEST HEMINGWAY, SU PRIMER PURO HABANO LO FUMÓ CON ÉL, AÑOS MÁS TARDE LE HOMENAJEÓ CON SU FAMOSA CANCIÓN, FUMANDO ESPERO.

El salto a Hollywood no se hizo esperar, no fue la primera, ya que antes deslumbró la donostiarra Conchita Montenegro en los años 30. Pero sí fue Sara la que se consolidó en el mercado americano con  grandes películas. Debutó a lo grande con Veracruz en 1954, con actores de la talla de Gary Cooper, Burt Lancaster y Charles Bronson.  Deslumbró a todos, hizo amistad con los más grandes, James Dean, Alfred Hitchcock, Marlon Brando, Elisabeth Taylor,  e incluso se permitió rechazar un contrato en exclusiva con la Columbia Pictures.

Quizá fue el amor lo que le llevó a llevar su carrera por libre, en 1954 rueda Dos Pasiones y un amor, durante el rodaje  se enamoró del director Anthony Mann , fue su primer matrimonio que duró siete años. Sara se quedó embarazada pero perdió al hijo que esperaba con el director americano , el bebé tenía 8 meses de gestación después de una caída por una escalera. Ya nada fue igual en la vida de la Montiel.

CUANDO LLEGÓ A HOLLYWOOD EN 1954, LA APODARON LA MARILYN MEXICANA POR LA SEXUALIDAD QUE DESPRENDÍA. ELLA NO SE CANSABA DE REPETIR QUE ERA ESPAÑOLA.

Su carrera en Hollywood no duró mucho, en 1957 regresa a España para rodar El último cuplé, una película de bajo presupuesto que obtuvo un fenomenal taquillazo, “Aquí se vive mejor”, dijo la artista, la lista de películas todas de gran éxito no se hizo esperar, La Violetera, Carmen la de Ronda, Mi último Tango, La Bella Lola, sus películas se estrenaban en cines de Bombay o El Cairo.

Llegó la Transición a España y el llamado cine del destape, la Montiel se retiró de la pantalla grande, Sara tenía 43 años y estaba en su máximo esplendor, rechazó ofertas millonarias de ese tipo de cine y Sara se dedicó en exclusiva a su carrera como cantante. Disfrutó de la vida con su tercer marido, Pepe Tous un empresario, productor y manager. Sara no pudo ser madre biológica, sufrió 11 abortos a lo largo de su vida, el último con 51 años. Si consiguió adoptar a dos niños, Thais y José Zeus. La artista manifestó que esos años de madra, fueron los más felices de su vida.

Sara Montiel todavía se casó por cuarta vez, después de la muerte de su marido Pepe Tous. Lo hizo con el cubano Toni Hernández, tenía 35 años menos que la Montiel.

Sara Montiel murió de muerte natural en su domicilio de Madrid un 8 de Abril de 2013, tenía 85 años. La actriz fue condecorada con la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo. Fue una verdadera artista, admirada por público de gustos muy dispares e inspiración a varias generaciones de artistas.