Alfredo Marqueríe Mompín (Mahón, Menorca, 17 de enero de 1907 – Puerto de Contreras, Cuenca, 31 de julio de 1974) fue un destacado periodista, crítico teatral y taurino español. Aunque inicialmente estudió Derecho y llegó a ser profesor en la Universidad Popular Segoviana en 1930, pronto orientó su carrera hacia su verdadera pasión: la literatura y el periodismo.
Comenzó su trayectoria literaria en la poesía, obteniendo un accésit del Premio Nacional de Literatura en 1934 por su obra Reloj. Posteriormente, se adentró en la novela y en el periodismo, desarrollando una carrera que lo llevaría a ocupar importantes puestos en medios como Segovia Republicana, donde fue redactor jefe en 1931, y Informaciones, en el que se desempeñó como subdirector entre 1931 y 1936.
Durante la Guerra Civil, fundó el diario España en Tánger en 1938, demostrando su capacidad para crear y dirigir medios. Tras la guerra, se volcó en su afición taurina, escribiendo la célebre sección »Banderillas de Fuego» en El Ruedo, donde aportaba una perspectiva humorística a sus crónicas de las corridas de toros. Su vínculo con el humor también se reflejó en su colaboración con la revista La Codorniz, donde firmaba como »El espectador Marqueríe».
Sin embargo, su mayor relevancia se dio en el ámbito del teatro. Fue un influyente crítico teatral en el diario ABC y en Pueblo, entre 1964 y 1973. Además, colaboró con la Hoja del Lunes de Madrid y escribió crónicas sobre circo y artículos costumbristas, siendo un apasionado de estos espectáculos. También realizó adaptaciones teatrales, algunas en colaboración con Enrique Llovet.
A lo largo de su vida recibió importantes reconocimientos, como el Premio Luca de Tena de Periodismo (1939) y el Premio Rodríguez Santamaría de Crítica Teatral (1943). Falleció trágicamente junto a su esposa en un accidente automovilístico en 1974.