Darío Díez Vicario nació en Reinosa, Cantabria, el 16 de septiembre de 1856. Hijo de Tomás Díez Bárcena y Juliana Vicario Sierra, tras obtener el bachillerato y el título de Perito Industrial, ingresó en la Academia de Infantería en 1874. Durante la Tercera Guerra Carlista, se unió al Batallón de Cazadores de Las Navas n.º 10, participando en diversas acciones cerca de Tolosa hasta la conclusión del conflicto en 1876. Ese año, aún como alférez, fue enviado a Cuba, donde luchó contra los insurgentes hasta 1883, regresando con el rango de capitán.
En España, fue destinado al Regimiento de Infantería Canarias n.º 43, y sirvió en varias localidades hasta ser nombrado profesor de la Academia de Infantería en 1893. Se casó en 1887 con María Vicario de la Fuente. En 1895, ascendió a comandante y regresó a Cuba, destacándose en múltiples combates bajo las órdenes del general Arsenio Linares. Fue herido en 1897, pero su valentía le valió los ascensos a teniente coronel y coronel, además de siete Cruces Rojas al Mérito Militar.
En 1899, ascendió a coronel y fue nombrado director de la Academia de Infantería en 1901, permaneciendo hasta 1903. En 1904, asumió el mando del Regimiento de Infantería de Murcia n.º 37 y en 1909 ascendió a general de brigada. Ese mismo año, fue enviado a Melilla para participar en las operaciones contra las cabilas del Rif. El 30 de septiembre de 1909, murió en combate cerca de Tetuán en el combate del Zoco de Jemis de Beni Bu Ifrur siendo ascendido póstumamente a general de división. En su honor, la plaza de El Espolón en Reinosa lleva su nombre.
Descansa en el Panteón de Héroes en el Cementerio de la Purísima Concepción de Melilla
Fila 3, nicho 9.
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